¿Puede alguien que haya tenido sífilis y tratado infectar a otros?

La sífilis se transmite normalmente de dos maneras: contacto con una lesión sifilítica o de una mujer embarazada al feto [1]. El tratamiento principal es la penicilina [1], que “mata” a las bacterias involucradas, una espiroqueta, especie Treponema pallidum , al romper la pared celular bacteriana [2].

Sin embargo, como apenas se reconoce, una bacteria no es más que una forma de un organismo subyacente, la forma L, que sobrevive incluso cuando se destruye su forma bacteriana [2,3]. Las formas L toman diversas formas, incluidos los gránulos ultramicroscópicos [4]. En la patología avanzada, llamada sífilis terciaria, los gránulos pueden predominar, o incluso ocurrir exclusivamente, sin espiroquetas encontradas [5].

Aparentemente, el tratamiento de la sífilis que previene las lesiones sifilíticas previene de manera confiable una transmisión directamente sifilítica de T. pallidum . Sin embargo, las formas de T. pallidum L persisten después del tratamiento con penicilina [5,6]. Entonces, es plausible que la transmisión subclínica de T. pallidum aún pueda ocurrir. Los resultados de los experimentos con animales sugieren esta posibilidad [7]. Si no es gestacional, podría requerir inyección de fluido, como es típico en experimentos con animales.

Las formas L a veces vuelven a las bacterias [6,8]. Por lo tanto, es concebible que las formas de T. pallidum L adquiridas a partir de un caso de sífilis tratado con éxito podrían, en algún momento, en ciertas condiciones, mediar en sífilis en el huésped secundario. Sin embargo, dada la epidemiología de la sífilis, eso debe ser raro, si ocurre, y no lo he visto documentado. Lo más probable es que, si se altera la inmunidad innata, las formas L albergadas podrían proliferar y mediar en alguna enfermedad de etiología críptica, desconocida convencionalmente [3,9-12].

  1. Stamm LV, “Sífilis: tratamiento con antibióticos y resistencia”, Epidemiol Infect , 2015 Jun; 143 (8): 1567-74, https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pub…
  2. Errington J, Mickiewicz K, Kawai Y y Wu LJ, “bacterias en forma de L, enfermedades crónicas y los orígenes de la vida”, Philos Trans R Soc Lond B Biol Sci , 2016 Nov 5; 371 (1707): 20150494, https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc…
  3. “L-form bacteria”, sitio web de la base de conocimientos del Protocolo Marshall , 23 de agosto de 2017, https://mpkb.org/home/pathogenes…
  4. Mattman LH, Cell Wall Deficient Forms: Stealth Pathogens , 3rd edn (Boca Ratón, FL: CRC Press, 2001), pp 236-238, https://books.google.com/books?i…
  5. Mattman, p 236, https://books.google.com/books?id=mincr2Hi81UC&pg=PA236&dq=pallidum
  6. Ovchinnikov NM, Delektorskiĭ VV y Ustimenko LM, “formas L de Treponema pallidum (estudios con microscopio electrónico)”, Vestn Dermatol Venerol , 1970 Aug; 44 (8): 53-7, https://www.google.com/search?q=”L-forms+of+Treponema+pallidum”+site%3Acabdirect.org
  7. Mattman, p 237, https://books.google.com/books?i…
  8. Mattman, p 238, https://books.google.com/books?id=mincr2Hi81UC&pg=PA238&dq=pallidum
  9. Domingue GJ Sr & Woody HB, “Persistencia bacteriana y expresión de la enfermedad”, Clin Microbiol Rev , 1997 Apr; 10 (2): 320-44, https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pub…
  10. Domingue GJ, “Desmitificando las formas pleomórficas en la persistencia y la expresión de la enfermedad: ¿son bacterias y la solución es peptidoglicano?”, Discov Med , septiembre de 2010; 10 (52): 234-46, https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pub…
  11. Proal AD, Albert PJ y Marshall TG, “El microbioma humano y la autoinmunidad”, * Curr Opin Rheumatol *, 2013 Mar; 25 (2): 234-40, https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pub…
  12. Proal AD, Lindseth IA y Marshall TG, “Las interacciones microbio-microbio y microbio-huésped conducen la disbiosis microbioma y los procesos inflamatorios”, Discov Med , 2017 Ene; 23 (124): 51-60, https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pub…