¿Cómo se repara el hígado?

El hígado es un órgano muy especial: incluso si más del cincuenta por ciento de su masa total está dañada, por ejemplo, por intoxicación, puede regenerarse por completo. Esta increíble habilidad es esencial. El hígado es el órgano metabólico más importante del cuerpo y tiene la tarea, entre otros, de desintoxicar la sangre. Para permitirlo, el hígado está equipado con una anatomía muy compleja: en los humanos, ambos lóbulos hepáticos están compuestos de alrededor de un millón de pequeños lóbulos que tienen un tamaño máximo de uno a dos milímetros.

La sangre que fluye al hígado ingresa a los lóbulos a través del llamado campo del portal, que separa los lóbulos vecinos entre sí. Desde allí fluye a través de microvasos rodeados de hepatocitos, el tipo de célula más común en el hígado, y drena en una vena central. Esta arquitectura especial asegura que la sangre se pone en contacto óptimo con los hepatocitos cuando fluye a través del órgano.