Aceite de castor
El aceite de ricino, cuando se usa para quistes sebáceos, muestra resultados efectivos. No solo cura el quiste inflamado, sino que también reduce el picor. Todo lo que debe hacer es remojar una pieza de tela limpia en aceite de ricino y colocarla directamente sobre el quiste infectado. Ahora, coloque una bolsa de agua caliente sobre la tela colocada sobre el quiste y comprima durante media hora. El calor del agua y el aceite de ricino ayudarán a curar el quiste fácilmente al encogerlo. Cuando aparece un quiste sebáceo en la cara o la espalda, puede intentar este método.
Por Vatera Amnida – bloguera de salud y belleza.