¿Sueña un feto?

Los investigadores que toman después de la vida cotidiana del bebé encuentran que invierte la gran mayoría de su energía, no practicando estas nuevas capacidades sino descansando. A las 32 semanas, se adormece del 90 al 95% del día. Algunas de estas horas se pasan en reposo profundo, algunas en reposo REM y otras en un vago expreso, como resultado del cerebro juvenil del embrión que no es lo mismo que el reposo en un bebé, niño o adulto.

En medio del descanso REM, los ojos del bebé se mueven hacia adelante y hacia atrás más o menos como hacen los ojos de un adulto, y numerosos científicos confían en que se está imaginando. DiPietro adivina que los bebés sueñan con lo que saben: las sensaciones que sienten en el útero.