Creo que revelar que estás sufriendo te hace sentir débil y expone tu vulnerabilidad a los demás o si en la India es una buena excusa para que tus padres te vuelvan a regañar por haber sido herido en primer lugar o por la causa del dolor en sí mismo. Una buena persona puede consolarte, pero una persona mala puede aprovecharte y hacerte sentir peor. Y en este mundo poderoso, este último parece ser más común y nadie realmente se arriesgaría y daría un salto de fe fácilmente a otra persona, ya sea su amigo, su mejor amigo, su hermano o incluso sus padres.
Es triste que este temor también se encuentre en los niños pequeños y que no recurran a su tutor cuando más lo necesitan.
