Después de tener conversaciones honestas con su jefe y no producir pasos positivos, consiga un mejor trabajo y luego renuncie.
Si ya es suficientemente malo, eres suicida o tienes problemas de salud graves, como insomnio debido a los terrores nocturnos, primero renuncias; aunque de lo contrario es mejor tener el poder para negociar su próximo puesto (responsabilidades laborales – a veces las empresas crean puestos para los candidatos adecuados) y paquete de compensación.