Algunas personas todavía se refieren al síndrome metabólico como ‘síndrome X’, sin embargo, ahora incluso se cuestiona la utilidad del término ‘síndrome metabólico’. No se ha acordado universalmente un diagnóstico preciso y existe evidencia de que el diagnóstico de síndrome metabólico por parte de los médicos no es mejor para predecir el riesgo cardiovascular (cardíaco) que los métodos habituales.
Obviamente, tener cualquiera de estos factores de riesgo no es bueno, pero cuando se combinan, preparan el escenario para problemas graves. Estos factores de riesgo duplican el riesgo de enfermedad de los vasos sanguíneos y del corazón, lo que puede provocar ataques cardíacos y derrames cerebrales. Aumentan su riesgo de diabetes en cinco veces.
El síndrome metabólico también se está volviendo más común, pero la buena noticia es que puede controlarse, en gran medida con cambios en su estilo de vida.
