¿Cómo está perdonando a alguien un proceso de auto curación?

Aferrarse a la ira es como agarrar un carbón caliente con la intención de arrojárselo a alguien, pero bueno, tú eres el que se quema.

Cuando alguien ha sido ofendido, la ira inicial, la decepción, la duda de uno mismo, la vulnerabilidad y la tristeza pueden dañarlo sin siquiera darse cuenta. El perdón no es para la otra persona, es para TI. Perdonar a alguien no significa que esté perdonando o excusando el acto incorrecto, no significa que tenga que mostrar su grandeza a la otra persona, y eso no significa que deba continuar incluyendo la persona en tu vida

Al perdonar, estás aceptando la realidad de lo que sucedió y buscando la forma de vivir en un estado de resolución con ella. Esto puede ser un proceso gradual, y no necesariamente tiene que incluir a la persona a la que se le perdona.

El perdón te hace sentir más feliz, más saludable y más empático. Cada uno de nosotros tiene fallas, cometemos errores (a veces nos equivocamos), nos damos cuenta, aprendemos. De acuerdo, algunos de nosotros nunca aprendemos. Pero cometer errores es ser humano. Y perdonar es más un rasgo piadoso. Después de todo, el rencor y los resentimientos que mantendrás para la otra persona te recordarán constantemente la traición y nunca te permitirán seguir adelante, nunca te permitirán crecer, nunca te permitirán ser ni siquiera un poquito poco mejor.

El perdón pone el sello final sobre lo que sucedió que te lastimó. Todavía recordarás lo que sucedió, pero ya no estarás obligado por él. Habiendo trabajado los sentimientos y aprendido lo que necesita hacer para fortalecer sus límites o satisfacer sus necesidades, estará en mejores condiciones para cuidarse en el futuro. Perdonar a la otra persona es una forma maravillosa de honrarte a ti mismo. Afirma al universo que mereces ser feliz.