Podría ser el tema es aburrido,
el maestro corre sin contacto visual con los niños,
otros niños están distrayendo,
o su hijo tiene problemas de atención.
Hable con ella, y si parece serio, consulte a un médico.
A veces los niños se cansan de la misma rutina una y otra vez. Sueñan porque preferirían estar cantando, bailando o coloreando. Si el niño es mayor, hay que tener en cuenta los primeros brillos de pequeños enamoramientos.