La práctica hace la perfección. Además, sospecho que a medida que te vuelves más consciente de tus sueños, más de tu mente está entrenada para recordarlos.
Recuerdo unos 6 sueños por noche. Extrañamente, un sueño épico que parece tener 2 horas de duración y que me llevaría una hora escribirlo puede caber en una pausa de 5 minutos. Es increíble la dilatación del tiempo.