Por debajo de 90/60 mmHg se considera presión arterial baja en adultos sanos. Por lo general, es más alto, hasta alrededor de 120/80 mmHg es ideal.
Una gran caída en la presión arterial por debajo de su línea de base CON signos y síntomas de hipoperfusión es peligrosa. Significa que es probable que te encuentres en shock y necesites una intervención urgente.
El número de presión arterial y el cuadro clínico juntos son más importantes que el número en sí. Si un paciente está en 90/60 y está sentado cómodamente, charlando y sintiéndose bien, no estaría tan preocupado. Si ese mismo paciente está en 90/60, sintiéndose muy aturdido, sus extremidades están frías y tiene dificultad para respirar, eso es muy preocupante.
