Lo que mi jefe hizo cuando me enfermé fue condescendiente conmigo. Luego, cuando tomé un día de enfermedad, me gritó y me dijo que no era profesional por tomarme un día de enfermedad “sin una buena razón”. No había hecho nada malo, de hecho todavía estaba haciendo un buen trabajo. Me despidió con una nota insultante y no se molestó en hablarme en persona.
Estoy seguro de que lo harás mejor que eso.
Lo que hicieron la mayoría de los empleadores (porque sucedió más de una vez) fue referirme a los servicios de asistencia al empleado, darme permiso (sin pago si no tenía permiso) o una transferencia a un puesto menos estresante. Cuando volví al trabajo, también me permitían ajustes en las horas de trabajo porque tenía que mantener un horario de sueño estricto.
Nadie comentó sobre mi enfermedad o intentó intervenir aparte de referirse y es lo mejor. Los gerentes del lugar de trabajo no están calificados para tratar enfermedades mentales que no sean de apoyo general.
En el trabajo profesional donde podría necesitar supervisión clínica para casos en los que tengo menos experiencia, los supervisores clínicos se atienen a asuntos clínicos y no juegan un rol en el manejo de mi trastorno bipolar. Depende de mi psiquiatra que trata de determinar, en colaboración conmigo, mi regreso al trabajo. Los empleadores profesionales pueden solicitar una carta de autorización, la cual me complace proporcionar, pero en realidad no es necesaria.
EDITAR: para alguien que no está en tratamiento pero parece estar muy mal, concéntrese en el problema en el trabajo. Es decir, si son disruptivos o improductivos. Si no, entonces no tienes un problema.
¿A qué nuevas empresas puedes aventurarte después de estudiar economía de la salud?
Puede instarlos a ver a un psiquiatra. Nadie hizo eso por mí en las primeras etapas, lo que significa que fue tres años antes del diagnóstico. La mejor manera es relatar la historia de alguien que conoces que se enfermó, y luego mejorar después de ver a un psiquiatra. O una celebridad. Puede darles un tiempo libre para recuperarse si no desea despedirlos, o cambiar tareas y horas para acomodarse.