Si los humanos desarrollaran tolerancia al humo del cigarrillo, los fumadores más pesados serían los más saludables entre los fumadores. En cambio, ese no es el caso. Mientras más fume, más aumentarán sus riesgos cardiovasculares y de cáncer.
Para embriones, fetos, bebés y los más pequeños, la exposición al humo del cigarrillo es aún peor que para los adultos porque están en desarrollo.
De una publicación muy reciente que revisa los efectos del humo en los fetos y el humo postnatal a través del humo de segunda mano:
Se revisa la investigación que describe estos efectos adversos de la exposición tanto en el útero como en la infancia, incluidos los hallazgos de modelos animales y humanos. Se discuten los siguientes resultados físicos adversos: síndrome de muerte súbita del lactante, bajo peso al nacer, disminución de la circunferencia de la cabeza, infecciones respiratorias, otitis media, asma, cáncer infantil, pérdida de la audición, caries dental y el síndrome metabólico. Además, se describe la asociación entre los siguientes resultados cognitivos y conductuales adversos y tales exposiciones: trastorno de la conducta, trastorno por déficit de atención e hiperactividad, rendimiento académico deficiente y deterioro cognitivo. La evidencia que respalda los efectos adversos de la exposición al SHS es extensa pero se está expandiendo rápidamente debido a la mejora de la tecnología y la mayor conciencia de este profundo problema de salud pública.
Física, conductual, … [Curr Probl Pediatr Adolesc Health Care. 2014]