Sus articulaciones pueden producir una variedad de sonidos: estallidos, grietas, trituración y chasquidos. Las articulaciones que se “quiebran” son los nudillos, las rodillas, los tobillos, la espalda y el cuello. Existen diferentes razones por las cuales estas articulaciones “suenan”.
Gases que escapan: los científicos explican que el líquido sinovial presente en sus articulaciones actúa como un lubricante. El fluido contiene los gases oxígeno, nitrógeno y dióxido de carbono. Cuando abre o agrieta una articulación, estira la cápsula articular. El gas se libera rápidamente, lo que forma burbujas. Para volver a romper el mismo nudillo, debes esperar hasta que los gases vuelvan al líquido sinovial.
Movimiento de articulaciones, tendones y ligamentos: cuando una articulación se mueve, la posición del tendón cambia y se mueve ligeramente fuera de lugar. Puede escuchar un chasquido cuando el tendón vuelve a su posición original. Además, sus ligamentos se pueden tensar a medida que mueve sus articulaciones. Esto ocurre comúnmente en la rodilla o el tobillo, y puede hacer un crujido.
Superficies rugosas: las articulaciones artríticas producen sonidos causados por la pérdida de cartílago liso y la rugosidad de la superficie de la articulación.
¿Su agrietamiento en las articulaciones es dañino? Si siente dolor cuando se le salen las articulaciones, entonces debe buscar un profesional de la salud. En términos de agrietamiento de los nudillos, algunos estudios muestran que el agrietamiento de los nudillos no causa daños graves. Otros estudios muestran que el agrietamiento repetitivo de los nudillos puede dañar el tejido blando de la articulación. También puede conducir a un agarre débil y una mano hinchada.