¿Por qué el calor nos adormece, mientras que el frío nos alerta?

Evolucionamos en un ambiente subtropical, por lo que naturalmente funcionamos (despiertos o dormidos) mejor a temperaturas más cercanas a nuestra temperatura interna. También sobrevivimos a la Edad de Hielo, cuando la comida era escasa y los peligros ambientales eran más extremos. Si caes en un río helado, debes estar alerta para actuar rápidamente o morir. Por otro lado, si saltas a aguas tropicales, el tiempo está de tu lado, y disfrutas perezosamente del baño. Sin embargo, este estado de alerta solo es temporal. Una vez que aparece la hipotermia, sus sentidos y su agudo pensamiento se vuelven tristes, mientras su cuerpo lucha para mantener el funcionamiento de sus órganos.

Bueno, esto puede estar relacionado con el flujo sanguíneo. Una temperatura baja aumenta la presión arterial porque las venas comienzan a apretarse, por lo que aumenta la frecuencia sanguínea que llega a los músculos. Cuando la temperatura es más cálida, nuestras venas se vuelven más “relajadas”, por lo que la baja presión baja la velocidad de la sangre para que los músculos estén más relajados. Pero debes pensar que esto sucede en un rango corto de temperatura. Porque, si la temperatura es demasiado fría, comenzaremos a temblar y estar pálidos porque la sangre se dirigirá al centro corporal más importante: el cerebro y el corazón. Entonces, menos sangre alcanzará los músculos y nosotros, después de algunas veces, nos sentiremos débiles y entumecidos.