La lista de posibles causas es bastante grande y depende en cierto grado de dónde vives (como ya se señaló). En muchos lugares del mundo, los agentes infecciosos son probablemente la causa más común (bacterias, parásitos, virus), en su mayoría transmitidas por el agua. Pero además de estas causas “extrañas”, uno tiene que agregar la enfermedad de Crohn, colitis ulcerativa, enfermedad celíaca, intolerancia a la lactosa, síndrome del intestino irritable, malabsorción, insuficiencia pancreática, tal vez alergias alimentarias (esto no es tan claro), Clostridium Dificile enterocolitis (a menudo debido a antibióticos) y estoy seguro de que me he perdido algo.
Encontrar la causa en cualquier persona puede ser complicado y requiere una evaluación cuidadosa por parte de un internista o un gastroenterólogo.