¿Cuáles son algunos buenos ejemplos de “los médicos siempre serán doctores”?

Un niño pequeño estaba caminando por un camino y se encontró con una serpiente de cascabel. La serpiente de cascabel estaba envejeciendo. Él preguntó: “Por favor, chiquillo, ¿puedes llevarme a la cima de la montaña? Espero ver el ocaso una última vez antes de morir”. El niño respondió “No, señor serpiente de cascabel. Si te recojo, me morderás y moriré”. La serpiente de cascabel dijo: “No, te lo prometo. No te morderé. Solo por favor llévame a la montaña”. El pequeño pensó en eso y finalmente levantó la serpiente de cascabel, la tomó cerca de su pecho y la llevó hasta la cima de la montaña.

Se sentaron allí y vieron el atardecer juntos. Fue tan hermoso. Luego, después de la puesta del sol, la serpiente de cascabel se volvió hacia el niño y le preguntó: “¿Puedo irme a casa ahora? Estoy cansado y soy viejo”. El niño recogió la serpiente de cascabel y nuevamente la llevó a su pecho y la sostuvo con fuerza y ​​seguridad. Bajó por la montaña sosteniendo la serpiente con cuidado y se la llevó a su casa para darle algo de comida y un lugar para dormir. Al día siguiente, la serpiente de cascabel se volvió hacia el niño y le preguntó: “Por favor, hijito, ¿me llevarás a mi casa ahora? Es hora de que deje este mundo, y me gustaría estar en mi casa ahora”. El niño sintió que había estado a salvo todo este tiempo y que la serpiente había cumplido su palabra, por lo que se lo llevaría a su casa según lo pedido.

Recogió cuidadosamente la serpiente, la tomó cerca de su pecho, y lo llevó de vuelta al bosque, a su casa para morir. Justo antes de dejar la serpiente de cascabel, la serpiente de cascabel se volvió y lo mordió en el cofre. El niño gritó y arrojó la serpiente al suelo. “Señor Snake, ¿por qué hizo eso? ¡Ahora seguramente moriré!” La serpiente de cascabel lo miró y sonrió, “Ya sabías lo que era cuando me recogiste”.

Entonces alguien llevó a ese chico al hospital y hubo una buen doctor que le dio algo de antídoto. El chico se recuperó. Y todos vivieron felices por siempre.