El aumento de la ingesta de agua es un síntoma común que se observa en perros con diabetes no tratada o no controlada. También puede ser un signo de otros problemas de salud como la enfermedad de Cushing y la enfermedad de Kindey. La única manera de averiguarlo con certeza es llevar a su perro a un veterinario. Cuanto antes se diagnostique, se podrá iniciar el tratamiento más rápido y se podrá prevenir el daño permanente al cuerpo con mayor rapidez. Por supuesto, también puede ser que su perro esté tratando de mantenerse frío o que él / ella esté más activo y necesite más hidratación. Pero como dicen, “es mejor estar seguro que lamentar” o algo así de todos modos 🙂 ¡Buena suerte, espero que todo salga bien!
– Connie M.
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