“En conclusión, la circuncisión masculina del bebé debe continuar siendo internacional siempre y cuando sea aprobada por ambos padres, y realizada por personas con habilidades quirúrgicas apropiadas en instalaciones que puedan proporcionar una esterilización, cuidado de heridas y anestesia apropiados. Bajo estas condiciones, los daños asociados con la circuncisión masculina infantil son raros. La circuncisión masculina infantil está justificada legal y éticamente. Es en el mejor interés del niño desde el aspecto físico, mental y cultural. Sus beneficios superan a sus daños. Prohibir la circuncisión masculina del bebé privará a los padres de sus derechos para garantizar el bienestar de sus hijos, lo cual es primordial. Tal prohibición privará a las familias de su derecho a practicar sus creencias religiosas y culturales. Prohibir la circuncisión infantil masculina violará varios principios éticos, incluidos la beneficencia y la justicia, y dará lugar a graves consecuencias catastróficas “.
Circuncisión masculina infantil no terapéutica: perspectivas de evidencia, ética y derecho internacional
Se usan anestésicos seguros.