Hay muchas maneras naturales de aliviar los calambres, pero cuál es el mejor depende un poco del tipo de calambre (calambres musculares, cólicos menstruales, cólicos digestivos …)
Desde una perspectiva ayurvédica, los calambres son generalmente un signo de demasiado Vata y pueden aliviarse con aceite y calor. Pruebe una ducha tibia y masajee suavemente los músculos de los calambres; si tiene aceites que le calientan (sésamo, semillas de mostaza), puede aplicarlos también. Las almohadillas térmicas o las botellas de agua caliente son excelentes para los calambres que son más internos, para permitir que el calor “penetre”.
Si tiene calambres con regularidad, puede verificar dos veces su ingesta de minerales: magnesio (pruebe remojo en sales de epsom), calcio (en productos lácteos, frijoles) y potasio (en la mayoría de las frutas y verduras, especialmente plátanos).
Para los calambres en las pantorrillas, estire esos músculos inclinando el pie hacia arriba para que los dedos del pie apunten a su cara (o lo más cerca que pueda de llegar a esa dirección;)).
