El sonrojo generalmente se distingue, a pesar de una estrecha relación fisiológica, del enrojecimiento, que es más intenso y se extiende a más parte del cuerpo, y rara vez tiene una fuente mental. Si el enrojecimiento persiste durante un tiempo anormal después de sonrojarse, entonces se puede considerar un signo temprano de rosácea.
El eritema craneofacial idiopático es una afección médica en la que una persona se sonroja intensamente con poca o ninguna provocación. Casi cualquier situación puede provocar un rubor intenso y puede tomar uno o dos minutos para que el rubor desaparezca. El rubor severo puede dificultar que la persona se sienta cómoda en situaciones sociales o profesionales. Las personas que tienen fobia social son particularmente propensas al eritema craneofacial idiopático. Tratamientos psicológicos y medicamentos pueden ayudar a controlar el rubor
