Tengamos en cuenta este hecho, que la exposición prolongada a la música, que es inadecuadamente alta, afectará su capacidad auditiva. Como lo han observado varios estudios, la pérdida de audición inducida por diferentes ruidos fuertes es un proceso lento. Se sabe que un gran número de personas experimentan una pérdida auditiva de pequeña a cierta después de exponerse a música muy alta. Esta pérdida de audición es inicialmente temporal, pero si se continúa la exposición a tal volumen, puede provocar un daño permanente.
Puede afectar el aprendizaje y la capacidad del cerebro para retener y recuperar información. Si llega a esa etapa, se requiere el audífono para amplificar los sonidos y hacerlo comprensible. Si desea proteger sus oídos de dicho daño, se recomienda el uso de tapones para los oídos diseñados para escuchar música. Otra cosa que hacer es reducir el volumen, ya que no amortiguaría el sonido. Estos tapones para los oídos están disponibles en diferentes tipos, así como a medida y rangos de precios.