La explicación más parsimoniosa es que ella misma ha perturbado el sueño, independientemente de ti. Cuando las personas experimentan dificultades para dormir cada noche, se vuelven particularmente intolerantes ante cualquier otra interrupción por parte del compañero de cama.
Bajo estas circunstancias, el conjunto de investigaciones en esta área indica claramente que dormir por separado hasta que el problema se resuelva da como resultado una mejora en la satisfacción de las relaciones.