Mantén la calma y no discutas con ella, ya que es una pérdida de tiempo para los dos. Solo escuche todo lo que dice como un hijo obediente, inculque a los buenos y simplemente olvide los malos.
Verla de esta manera la hace feliz y lentamente ella entenderá que ella fue demasiado dura contigo.
¡Después de todo son madres! Qué duros pueden ser con nosotros, ellos son los que más nos aman.
Aclamaciones