La gripe se transmite a través de gotitas y fomites.
La mascarilla simple nos ayuda de tres maneras: 1) protege la exposición de grandes gotas.
2) evita que las secreciones infecciosas de los pacientes se propaguen al medio ambiente y, por lo tanto, ayuda a contener la transmisión.
3) el uso de mascarilla también nos impide tocarnos la nariz y la cara sin saberlo, y esto evita que la infección se propague a través de fomites.
PD: máscara más nueva, por ejemplo, N 95, etc. tienen poros muy pequeños que son aún más efectivos.