En primer lugar, corrijamos un malentendido. “Obamacare”, también conocida como Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio, no es un seguro. Usted no se inscribe en “Obamacare”. Usted compra un seguro privado, de una aseguradora privada. Puede hacerlo por su cuenta o puede hacerlo a través de los mercados de atención médica. Proporcionado por su estado, o si se negaron a participar, del mercado federal de cuidado de la salud. La Affordable Care Act es una legislación que regula la industria de seguros. Eso es todo.
Un gran problema para los no asegurados que mencionas (¿41 millones? Esa cifra parece un poco alta) es la negativa mencionada a participar en la expansión de Medicaid y proporcionar mercados estatales de atención de la salud. Esto deja a un gran segmento de personas que realmente no pueden pagar un seguro privado, pero que no son lo suficientemente pobres como para calificar directamente para Medicaid. Esto es más un problema de seguro privado que no proporciona cobertura de seguro más asequible y estados que se niegan a participar en un programa que beneficiaría a sus ciudadanos.
La afirmación de que el costo del seguro es tanto como un pago de la hipoteca o dos pagos del automóvil también es un poco ingenuo. ¿Puedes encontrar un seguro que cueste tanto? Probablemente, pero sé por mi propia experiencia que puedo encontrar un seguro que es más barato que el que mi empleador me brindó en el mercado de atención médica. Y mi estado fue uno que se negó a participar en la expansión de Medicaid.
En respuesta a su pregunta, no, no es el momento de revocar el ACA. A menos, por supuesto, que implementemos un sistema de pagador único que la mayoría de las encuestas indican que la mayoría de los estadounidenses preferiría. Salvo eso, si hay problemas con la ACA, deberían corregirse. Contrariamente a la creencia popular, la ley, en general, funciona.
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