A través de un proceso llamado vasodilatación, nuestro cuerpo reemplaza el calor para mantener nuestra temperatura estable.
Cuando nuestra temperatura es demasiado cálida, como con el ejercicio, nuestros vasos sanguíneos se dilatarán para llevar esa sangre caliente a la superficie y emitir calor al ambiente más frío. De ahí el rubor que ves con clima cálido o actividad.