La mayoría de nuestras vidas están llenas de obligaciones familiares, laborales y comunitarias, y en algún momento sentimos que estamos “agotados”. Aquí hay ocho eliminadores de estrés inmediatos para ayudar a “llenar el tanque”. Así que tome una respiración profunda y relajante y siga leyendo.
- Esté atento a la próxima instancia en la que se encuentre molesto o enojado por algo trivial o sin importancia. Luego practique dejar ir, hacer una elección consciente para no enojarse o enojarse. No se permita perder el pensamiento y la energía donde no se lo merece. El manejo efectivo de la ira es un reductor del estrés probado y verdadero.
- Respire lenta y profundamente. Antes de reaccionar ante la siguiente aparición estresante, respire profundamente tres veces y libérelas lentamente. Si tiene unos minutos, pruebe una técnica de relajación como la meditación o la imagen guiada
- Siempre que te sientas abrumado por el estrés, practica hablar más despacio de lo normal. Descubrirá que piensa con más claridad y reacciona más razonablemente ante situaciones estresantes. Las personas estresadas tienden a hablar rápido y sin aliento; Al disminuir la velocidad de su discurso, también aparecerá menos ansioso y tendrá más control sobre cualquier situación.
- Inicie una estrategia efectiva de administración del tiempo. Elija una cosa simple que haya pospuesto (por ejemplo, devolver una llamada telefónica, concertar una cita con el médico) y hacerlo de inmediato. El simple hecho de ocuparse de una sola responsabilidad persistente puede ser energizante y puede mejorar su actitud.
- Salga al aire libre por un breve descanso . Nuestros abuelos tenían razón sobre el poder curativo del aire fresco. No se deje intimidar por el mal tiempo o un horario completo. Incluso cinco minutos en un balcón o terraza pueden ser rejuvenecedores.
- Beba mucha agua y coma refrigerios pequeños y nutritivos. El hambre y la deshidratación, incluso antes de que te des cuenta de ellos, pueden provocar agresividad y exacerbar los sentimientos de ansiedad y estrés.
- Haz una prueba de postura rápida. Mantenga la cabeza y los hombros erguidos y evite agacharse o desplomarse. La mala postura puede provocar tensión muscular y aumento del estrés. Si está atascado en un escritorio la mayor parte del día, evite las lesiones por esfuerzo repetitivo y los músculos doloridos asegurándose de que su estación de trabajo refleje buenos principios de diseño ergonómico. Hay información sobre ergonomía y estaciones de trabajo saludables para asegurar que su estación sea más segura desde el punto de vista ergonómico.
- Planifique algo gratificante para el final de su día estresante, aunque solo sea un baño relajante o media hora con un buen libro. Deje de lado el trabajo, la limpieza o las preocupaciones familiares por un breve período antes de acostarse y permítase relajarse por completo. No dedique este tiempo a planificar el horario de mañana ni a realizar tareas que no realizó durante el día. Recuerde que necesita tiempo para recargarse y energizarse. Estarás mucho mejor preparado para enfrentar otro día estresante.